VI Encuentro Continental Americano
VIDA, PAN, PAZ, LIBERTAD. Laicos de Acción Católica en la ciudad para un mundo más humano •México, 8 al 11 de julio de 2010

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La pobreza y exclusión social, la familia y la participación ciudadana, fueron los principales desafíos que asumieron los participantes del VI Encuentro Continental Americano de Acción Católica, que se desarrolló del 8 al 11 de julio del presente año en la ciudad de México, bajo el lema “‘Vida, Pan, Paz, Libertad’ Laicos de Acción Católica en la ciudad para un mundo más humano”.

De esta manera, los 80 dirigentes, provenientes de doce países americanos -Argentina, Colombia, Costa Rica, Ecuador, EEUU, El Salvador, Guatemala, México, Nicaragua, Perú, Puerto Rico y Venezuela- y de España, Italia y Burundi , promoverán acciones a favor de los sectores más postergados.

Luego de reflexionar sobre la realidad social, eclesial y asociativa, iluminada por el Documento Conclusivo de Aparecida, los dirigentes también se comprometieron a defender y dignificar la vida desde su concepción hasta la muerte, fortalecer la familia y promover la educación para la cultura de la paz y la convivencia.

El Papa Benedicto XVI hizo llegar su mensaje al encuentro organizado por el FIAC (Foro Internacional de Acción Católica), en el que los animó a “profundizar el papel fundamental de los laicos en la construcción de una sociedad más humana, que responda al proyecto original de Dios sobre la humanidad”.

Mayor protagonismo
Las jornadas comenzaron con una reflexión de Mons. Doménico Sigalini, Obispo de Palestrina, Asesor de la AC Italiana y del FIAC donde invitó a los participantes a meditar la Palabra de Dios (Mt 10 7-15) y a asumir “una misión gratuita y urgente” sabiendo que ” somos todos un don de Dios a la humanidad, no solo para nosotros mismos”.

Siguieron luego, las palabras de bienvenida de Ana María Trodd de Codda, presidenta de la AC Mexicana; y de Emilio Inzaurraga, presidente de la AC Argentina y Coordinador del FIAC, quien resaltó los cuatro aspectos priorizados en el lema “son valores que asumiremos prioritariamente en la construcción de un mundo más humano”, por lo que subrayó la necesidad de “involucrarnos en la realidad de nuestro continente, de nuestros países, de nuestros pueblos, desde nuestro carisma e identidad”.

Entre las principales preocupaciones a atender, mencionó el crecimiento de la pobreza, ya que en 2010 hay 9 millones más de pobres respecto al año anterior, mientras que la cantidad de indigentes se incrementó en un 13,7%; o que el 25% de los jóvenes está fuera del sistema educativo y del mercado laboral.

“La educación, la salud, el cuidado del medio ambiente, el fortalecimiento de las democracias, la corrupción, la participación ciudadana, la libertad de expresión y de profesar la fe, la vida de los más vulnerables y la protección de la familia, son los temas que merecen nuestra reflexión y compromiso”, agregó durante su alocución.

Inzaurraga alentó a los dirigentes a “ser profetas y testigos del Evangelio” y a “impulsar a nuestros grupos a salir al encuentro del mundo y la cultura, para evangelizar apasionadamente lo cotidiano”.

Tres miradas sobre una misma realidad : social, eclesial y asociativa
La reflexión sobre la realidad social fue iniciada por la presentación que hizo cada país, a partir de las cuales se desarrollaron las ponencias del Dr. Rodrigo Guerra López – Dr. en Filosofía- ex director del Observatorio social del CELAM y del Dr. Bernardo Kliksberg – Asesor de organismos internacionales ONU, BID, Unesco y Unicef – para luego identificar los desafíos.

En el análisis de la realidad eclesial, Mons. Jorge Lozano, Obispo de Gualeguaychú y Responsable de la Sección Pastoral Social del CELAM, compartió con los participantes las “perspectivas eclesiales en América a la luz del Documento de Aparecida” recalcando que “En el pueblo de Dios, “la comunión y la misión están profundamente unidas entre sí… La comunión es misionera y la misión es para la comunión”. En las iglesias particulares, todos los miembros del pueblo de Dios, según sus vocaciones específicas, estamos convocados a la santidad en la comunión y la misión. (DA 163)

Luego trabajaron en una mirada asociativa integradora de lo anterior con la participación de Mons. Javier Navarro Rodríguez, referente para los laicos de la C.E. Mexicana quien desarrolló la corresponsabilidad de los laicos en la misión evangelizadora y luego de exponer sobre la identidad y el carisma de la AC se presentaron cuatro experiencias significativas del trabajo de los miembros de la AC en orden al lema propuesto:

• Una directora de un establecimiento educativo,
• un testimonio de reforma estructural en el mundo obrero reclamando una urgente legislación sobre los accidentes de trabajo,
• un servicio de formación y de promoción humana en un taller-escuela de panadería y
• la implementación de un programa de ayuda a los niños llevado adelante en alianza con una empresa, un municipio y la AC a favor de la promoción de 500 niños y sus familias en un barrio de condiciones muy humildes.

También se vieron como prioridades la formación, especialmente en la Doctrina Social de la Iglesia, la promoción de espacios formativos para niños y jóvenes, la incidencia en la agenda pública y el acompañamiento de las personas que se desempeñan la estructura política y social de los países con una opción por los valores evangélicos.

Durante estos días han podido compartir las distintas situaciones que viven los laicos presentadas por los dirigentes de cada país que, entre fragilidades y dones, consagran su vida a servir a la evangelización con este carisma particular señalado y ponderado por la misma Iglesia, particularmente en la palabra de sus pontífices, Juan Pablo II y Benedicto XVI como un “don del Espíritu” a su Iglesia.

La Santidad como propuesta de vida
El testimonio de vidas ejemplares de la AC fueron expuestas en presentaciones multimedia a lo largo del encuentro, por ejemplo la de Manuel (Lolo) lozano Garrido – Beato Periodista de la AC Española-, San Alberto Hurtado, Asesor de la AC en Chile y el relato de Mons. Gregorio Rosa Chávez de la vida y el mensaje de Mons. Oscar Romero donde todos los participante pudieron ver imágenes de su gran dedicación y amor a los más pobres de El Salvador, su lucha por la dignidad humana y la persecución que culminó con su asesinato.

La peregrinación al santuario de Guadalupe fue uno de los momentos más significativos, especialmente en la Consagración a la Virgen dirigida por Mons. Luis Collazuol, en la misa presidida por el Nuncio Apostólico en México Mons. Christophe Pierre.

El FIAC y el trabajo de los Jóvenes
El Domingo por la mañana, María Grazia Tibaldi Secretaria del Secretariado FIAC – Roma presentó la agenda y los proyectos del FIAC donde se destacaron los cursos sobre laicado llevados adelante en conjunto con la Universidad Pontificia Gregoriana, la próxima Asamblea FIAC a realizarse en Rumania en el año 2012 y la “Fundación PIO XI – AC Escuela de Santidad” dedicada a la promoción de las causas de Beatos y Santos de miembros de la AC. También los miembros del Grupo Promotor de AC en América, integrado por dirigentes del continente y asesorados por el Padre Fabián Esparafita, relataron los proyectos en marcha (Nicaragua – Costa Rica – Guatemala – EEUU) y se pusieron a disposición para las iniciativas de promoción de la AC en los distintos países.

Un momento destacado fue la mesa de los jóvenes, donde guiados por Maria Palau Melet – Coordinación de Jóvenes FIAC – AC España – presentaron a todos el trabajo y los anhelos de los jóvenes en cada una de las realidades presentes y el trabajo común, por ejemplo en la colecta para Tierra Santa y en la preparación para la próxima Jornada Mundial de la Juventud en Madrid 2011

La presencia y fecunda reflexión de Mons. Carlos Aguiar Retes, Mons. Jorge Lozano, Mons. Gregorio Rosa Chávez, , Mons. Christophe Pierre, Mons. Luis Collazuol, y Mons. Domenico Sigalini, acompañados por varios sacerdotes asesores de Acción Católica en sus países, convirtió estos días en una valiosa experiencia de comunión.

Prensa FIAC