En calidad de delegado de S.E. El obispo Ratko Peric, os traigo sus saludos, sus buenos deseos y sus oraciones para el éxito de este encuentro.
Mi deber es presentar un breve resumen histórico de la situación actual de la Iglesia en Erzegovina.

1. – Resumen histórico
A efectos del Derecho Canónico, la Iglesia en Erzegovina está dividida en dos diócesis: la diócesis de Mostar-Duvno y la de Trebinje- Mrkan. Para permitir un trabajo pastoral más eficaz, en realidad estas diócesis funcionan como un conjunto (un obispo, un presbiterio, instituciones comunes). También si la historia ha tenido aspectos negativos referentes a ambas diócesis, sus recorridos han sido diversos. Por estos motivos es necesario observarlas también por separado en el resumen histórico.

1.1. – La diócesis de Mostar-Duvno
En el territorio actual de la diócesis de Mostar-Duvno en la época del Bajo Imperio se formaron dos diócesis que tomaron el nombre de sus sedes: Delminium, Norona y Sarsenterum.
Me pararé brevemente sobre todo por su denominación en Delminium, o sea en la diócesis de Duvno. Pero no debemos olvidar el importante papel de los obispos de Makarska que ejercieron su poder en el territorio actual de la diócesis de Mostar-Duvno pero también en uno más amplio. En la Baja Edad Media y durante el gobierno otomano, fueron precisamente los obispos de Makarska que hicieron mucho por Erzegovina. Notables fueron sobre todo los dos obispos Kacic, los franciscanos Bartul y Petar/Pedro y finalmente sus sucesores franciscanos Marijan Lisnjic y el siervo de Dios Nikola Bjankovic.
La diócesis de Delminium en el territorio de Duvno fue mencionado solo en el 591 en una carta del papa Gregorio el Grande, dirigida a Malchus, obispo de ese municipio. Efectivamente allí fue derramada la sangre del obispo misionero mártir San Venancio en la segunda mitad del siglo III, pero los escritos de antes del año 591 no la nombran.
Aquella vieja diócesis de Delminium desapareció en torno a los inicios del siglo VII. En los primeros decenios del siglo XIV fue reconstruida por los papas de Avignon como defensa contra la Iglesia patarina difundida en Bosnia entera y que amenazaba el territorio de Croacia. Madija fue el primer obispo de la reconstruida diócesis desde 1337 a 1345. Aunque la sucesión de los obispos siguió hasta el siglo XVI, es difícil creer que en su mayor parte no pusiera nunca los pies en la diócesis y mucho menos que haya residido. Su último obispo fue el franciscano Mihael Jann de Praga. Este intentó residir en la diócesis, pero no lo consiguió porque la diócesis estaba devastada y casi sin habitantes y finalmente la dejó.
Fue en el período de la sanguinaria y larga guerra de Candia (1645-1669), que fue destructora sobre todo para los países cercanos a la frontera turco-veneciana.
Una nueva página para la diócesis fue confirmada por la separación política entre Erzegovina y la Bosnia otomana en el siglo XIX. En el 1844 los franciscanos de origen erzegovino se retiraron de Bosnia y construyeron el primer convento en Siroki Brijeg (1846) como sede de la misión independiente transformada en custodia en 1852 y luego en provincia en 1892. Paralelamente se fundó un vicariado apostólico de Erzegovina (1846) dirigido por el franciscano Rafo Basiric (1852), considerado el fundador del vicariado apostólico en Erzegovina y más tarde de la diócesis.
Durante la reconstrucción de la jerarquía en Bosnia-Erzegovina, sucedió que también la condición misionera de Erzegovina se transformó en condición canóniga regular (Bula del Papa León XIII Ex hac augusta del 5 de julio de 1881). Además del arzobispado y la provincia metropolitana de Sarajevo, se fundaron las diócesis de Banja Luka y Mostar (diócesis de Mostar-Duvno).
El franciscano pascal Buconjic, hasta entonces vicario apostólico, fue nombrado obispo de la diócesis recientemente constituida. Desde entonces se sucedieron cinco obispos a sentarse en la silla episcopal de Mostar (dos franciscanos: paskal Buconjic y Alojzije Misic, luego tres diocesanos: Petar Cule, Pavao Zanic y Ratko Peric). El número de sacerdotes diocesanos se ha incrementado y ejercen la actividad pastoral en esta vieja diócesis junto a los sacerdotes franciscanos.

1.2. – Diócesis de Trebinje
La diócesis de Trebinje tomó el nombre de la sede episcopal de Tribunium (Trebinje) que fue también cabecera de la provincia de Trebinje. A la diócesis se la menciona por primera vez en la Bula del papa Benedicto VIII (1012-1024) emitida el 27 de septiembre de 1022. En el transcurso de su larga existencia, la diócesis se enfrenta a diversas y graves dificultades. A veces parecía que las dificultades habían desaparecido. Las diferentes circunstancias políticas y sociales fueron la causa.
El momento decisivo en la vida de la diócesis de Trebinje fue cuando la sede Tribunia-Trabunja y luego la de Trebinje cayeron bajo el reinado de Raska. Uros I (1242-1276) entre le 1252 y 1254 expulsó al obispo de Trebinje Slavija. Aunque se trataba del soberano de religión ortodoxa, la expulsión tuvo también razones políticas. O sea, aunque la diócesis estaba vinculada a Dubrovnik, uros quiso librarse de la influencia política de Dubrovnik. El obispo Slavija se trasladó a Dubrovnik mientras la oficina del obispo quedó vacante. El papa Martín IV (1285-1285) con la Bula Ad audientiam nostram y luego su sucesor el Papa Honorio IV (1285-1287) con la Bula Lecta coram nobia dieron el poder y la orden al arzobispo Dubrovnik para nombrar y consagrar al obispo de Trebinje hasta el 18 de julio de 1432. Después de haber donado la isleta Molunat, el senado de Dubrovnik tomó este encargo hasta la caída de la República Ragusea en 1808. Antes, en 1361, la República Ragusea dio al obispo de Trebinje, residente en Dubrovnik, la isleta Mrkan como futura residencia en las cercanías de Dubrovnik, de esta menera el obispo adquirió otro título: obispo de Mrkan. La condición, ya de por sí muy difícil, se agravó todavía más cuando toda Erzegovina, incluso la diócesis de Trebinje, cayó bajo el gobierno otomano en 1482. En ese tiempo los escasos fieles quedaron privados no solo de obispo sino también de sacerdote. Esto duró mucho tiempo.
En el 1622 la Santa Sede funda la Congregación para la Propagación de la Fe (de propaganda Fide). Bajo el gobierno de esta Congregación apenas constituida se encontró también la diócesis de Trebinje que la Santa Sede proclamó “in partibus infidelium”. La atención de la Propagación para la instrucción de los sacerdotes y la apertura de los institutos (Loret, Fermo) aportó un poco de luz en la existencia de la diócesis. En ella hubo sacerdotes misioneros además de obispos residentes siempre en Dubrovnik, pero esta vez por orden de la Propagación visitaron más frecuentemente su diócesis.
A la muerte del obispo Nikola Feric en 1819 se interrumpe la sucesión de los obispos de la diócesis de Trebinje. Desde 1839 la diócesis fue regida por los vicarios nombrados por el capítulo de Dubrovnik. En 1839 el Papa Gregorio XVI en Bula Apostolici nostri muneria confió el gobierno de la diócesis al obispo de Dubrovnik, que a su vez la dirigió como Administrador Apostólico.
Cuando el Papa León XIII hubo introducido la jerarquía canónica regular en Bosnia-Erzegovina, la diócesis de Trebinje se integró en esta nueva provincia eclesiástica regida por el obispo de Dubrovnik en calidad de Administrador Apostólico para que no se dispusiera nada diferente.
El 8 de julio de 1890 el mismo Papa confió la administración de la diócesis al obispo de Mostar.

2. – Las diócesis de hoy
2.1. – La diócesis de Mostar-Duvno
Hoy la diócesis de Mostar-Duvno tiene unos 200.000 habitantes.
A efectos del Derecho Canónico está dividida en 7 decanatos y 66 parroquias. Los sacerdotes diocesanos y los religiosos franciscanos desarrollan actividades pastorales. A causa de tantas herencias históricas pero también por la falta de preparación para aceptar las disposiciones canónicas, desde hace más de 100 años en esta diócesis está sucediendo un caso triste, conocido como “caso erzegobés”, que obstaculiza el verdadero impulso y la actividad pastoral en el territorio de la diócesis. Ésta no tiene siquiera seminario, ni menor ni mayor. Aunque su actividad la desarrolla el Instituto de Estudios Teológicos para instruir a los fieles laicos; casi 100 catequistas diplomados han recibido la instrucción teológica para poder trabajar para el bien de la Iglesia en Bosnia-Erzegovina como profesores de la religión católica, asistentes pastorales o para desarrollar otros cometidos en la Iglesia o en la sociedad. La sede de la diócesis está en Mostar.
La misma ciudad de Mostar es sede de dos administraciones provinciales religiosas: Provincia franciscana OFM y provincia de las monjas franciscanas. En la diócesis, además de las Hnas. Franciscanas que son las más numerosas, desarrollan su actividad otras cinco comunidades religiosas: las Hermanas de la Caridad de San Vicente de Paul que actúan en los hospitales y otras unidades sanitarias; las Hijas de la Caridad que dirigen la escuela infantil “San José” de Mostar; las Hermanas Siervas del Niño Jesús – SMI que dirigen el centro de los discapacitados “Sagrada Familia” de Mostar; las Carmelitas que solo tienen casa en la parroquia de Gabela Polje y desarrollan la actividad pastoral y dirigen la escuela infantil; las hermanas de la Preciosísima Sangre de Jesús que actúan en la parroquia Prisoje. Aparte de los religiosos de la provincia franciscana no hay otras comunidades religiosas masculinas.

2.2. – La diócesis de Trebinje-Mrkan
Hoy la diócesis de Trebinje-Mrkan tiene cerca de 20.000 fieles. Está dividida en dos decanatos y 15 parroquias. Solo los sacerdotes diocesanos ejercen la actividad pastoral. No hay ni seminario ni ninguna comunidad religiosa. Las religiosas actúan solamente en dos parroquias, las monjas de la Caridad en Stolac y las Siervas del Niño Jesús en Neum y que dirigen también la escuela infantil en el ámbito de su convento. La diócesis está regida por el obispo de Mostar en calidad de Administrador Apostólico.

3. – Las destrucciones de la guerra
La última guerra ha golpeado materialmente también a la Iglesia en Erzegovina. En ambas diócesis han sido dañados completa o parcialmente un total de 106 edificios sacros. Una parroquia de la diócesis de Trebinje-Mrkan ha desaparecido completamente, la otra está completamente sin habitantes, la tercera es inaccesible mientras las tres parroquias están parcialmente ocupadas. En el territorio de la diócesis de Mostar-Duvno, 9 parroquias están completa o parcialmente destruidas, mientras 10.000 fieles han sido expulsados. En la noche del 6 al 7 de mayo de 1992 ha sido atacado e incendiado “el corazón de la diócesis” o sea la residencia episcopal de Mostar donde, además de los objetos preciosos ha sido quemada la rica biblioteca con casi 50.000 libros. En este tiempo de “paz” la Iglesia intenta sanar lo más posible las destrucciones de la guerra y reemprender la actividad pastoral normal en las parroquias y lugares golpeados por la guerra.

4. – Papel y lugar del fiel laico en la Iglesia en Erzegovina
La historia ha sido desfavorable para la Iglesia en Erzegovina no permitiendo desarrollar con intensidad el compromiso laical en nuestra Iglesia. Pero sería injusto no recordar a tantos testigos de la fe durante los diversos períodos de ocupación, de las expulsiones y de la dictadura. Creo que la obligación de esta Iglesia local es rescatar del olvido a todos los mártires, maridos y mujeres, colocados como los faros de gran intensidad dirigidos a las generaciones presentes y a las futuras.
Solo después de la introducción de la jerarquía canónica regular empieza el compromiso más intenso de los fieles laicos en la vida de la Iglesia. La constitución de tantas cofradías en la comunidad parroquial lo confirma. De todas formas el compromiso ha sido de breve duración y de débil impulso. El siglo XX lleno de guerras (tres grandes guerras) y sobre todo el régimen comunista en el poder en Yugoeslavia recientemente reducida a pedazos, han sofocado cualquier compromiso religioso en la iglesia y en la sociedad. Son numerosos los patíbulos donde se ha puesto fin a la vida de muchos testigos de la fe solo porque amaban a Dios, a la Iglesia, a su pueblo croato y al hombre. Las órdenes terceras de las comunidades religiosas, llamadas laicas, han sobrevivido a la dictadura comunista. De todas formas, su actividad de contenido espiritual se ha desarrollado rigurosamente dentro de la Iglesia.
En los últimos tiempos, después de “los cambios democráticos” aparecen los signos y la necesidad del compromiso más intenso en los fieles laicos. En muchas parroquias del Colegio pastoral, pero también fuera de ellas, surgen algunos grupos comprometidos y asociaciones de fieles tanto jóvenes como adultos que tienen voluntad y fuerza para participar de manera más comprometida en la vida de la Iglesia y de la sociedad. Pero esta actividad no ha tomado fuerza todavía. A nivel de la Iglesia local no tenemos aún ni asociación ni movimiento de laicos organizados y aceptados por la Iglesia.
Esperemos que este encuentro internacional sea una ocasión propicia para promover buenas iniciativas.

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III Encuentro Europa-Mediterràneo
POR UNA EUROPA FRATERNA. El contributo de la Acción Católica •Sarajevo, de septiembre 2003